Un filtro de cabina procesa el aire que ingresa en el compartimiento de pasajeros a través del sistema de calefacción y aire acondicionado del vehículo, lo que aumenta la comodidad de los pasajeros al atrapar partículas, polen y otros agentes irritantes.
EL CARBÓN ACTIVADO EN EL FILTRO DE CABINA deja a fuera contaminantes gaseosos tales como óxidos de nitrógeno, los vapores del combustible, ozono y otros olores del aire circundante. además de proteger del polvo y polen también filtra con mayor eficacia los gases de escape de otros coches y disminuye la aparición de olores en el habitáculo.